28 de octubre de 2014

¿Por qué se producen las perrillas?


Las perrillas se producen por infecciones en las glándulas de los párpados en el borde de los párpados se encuentra una zona que se denomina borde libre, es ahí donde nacen las pestañas.

Tanto en la base de las pestañas como en el borde libre existen glándulas, unas producen sudor y otras grasa; cuando se infectan se producen las "bolitas" que comúnmente se conocen como perrillas.

Durante la explicación se podrán dar cuenta que son dos tipos de "granitos" los que se pueden infectar.

En la base de las pestañas se encuentran glándulas que producen grasa y otras, sudor. En oftalmología se conocen como Zeis y Moll. Son muy pequeñas y se pueden "tapar"; al suceder esto se infectan y se produce una bolita blanca en el borde del párpado y también alrededor de la base de las pestañas, a ésta se le denomina perrilla.

Existe otra bolita que se produce también muy cerca de la región que acabamos de explicar, pero es completamente diferente tanto en su localización en el borde libre de los párpados, como en la estructura y características de las glándulas. Por detrás de las pestañas y en la zona donde las mujeres se pintan una "rayita" se encuentra la boquita de salida de estas glándulas que nos ayudan a la lubricación de los ojos, ya que producen grasa, la cual evita que se evaporen las lágrimas rápidamente. Cuando esta glándula se "tapa", también se infecta y se produce una "grano" mucho más grande y se le denomina chalazión.

La mayoría de las personas a estas dos situaciones tan diferentes las confunden y les llaman en forma generalizada perrillas.

Para continuar con la explicación, se tiene que enfatizar que existen dos tipos de "bolitas o granitos": perrillas y chalaziones.

Las perrillas se producen después de una infección en los párpados y se tapan las glándulas de Zeis y Moll. La perrilla es una bolita muy pequeña que se ve en la base de las pestañas. Inicia con molestia y dolor al tocarla; luego se torna rojo el borde del párpado. Uno o dos días después se nota la bolita blanca o amarilla, lo cual indica que las glándulas están infectadas.

El tratamiento de esta condición es a base de pomadas y gotas con antibióticos y antiinflamatorios. Existen remedios caseros que son conocidos desde hace siglos y las abuelitas dicen que con la uña o con una superficie fría se puede "rascar" y se saca la pus. También se menciona que al frotar una semilla de limón se rompe la piel del granito y se puede curar.

Todos los remedios caseros se podrían utilizar y nuestra cultura está muy dispuesta a realizar estas prácticas, las cuales no son malas, siempre y cuando estén vigiladas por algún especialista para evitar complicaciones, ya que también nuestra cultura nos lleva a pensar que nada malo nos va a pasar con los remedios caseros.

Tanto los remedios caseros como la automedicación pueden llevar a los pacientes a complicaciones severas, por ejemplo en este caso de las perrillas: si la infección se prolonga en tiempo, se puede dañar importantemente la piel del párpado y las pestañas, pudiendo aparecer lesiones importantes de piel.

Ahora les vamos a platicar del chalazión.

Esta condición se desarrolla debido a la infección de unas glándulas mucho más grandes que producen grasa y que también se encuentran al borde de los párpados.

Estas glándulas son las de Miebonio. Su boquita de salida de la grasa se localiza en el borde libre del párpado, entre las pestañas y lo blanco del ojo. En esta región es donde las mujeres se pintan una raya.

Las glándulas de referencia son más grandes y largas en comparación a las que provocan las perrillas. Existen 35 glándulas de Miebonio en el párpado superior y 35 en el inferior. Cuando hay infección tan sólo aparece en una o dos glándulas y puede brotar repetidamente en otras.
La grasa que se produce tiene como función proteger a la película lagrimal, para evitar que se evapore inmediatamente.

Al tener una lágrima con características normales los ojos se mantendrán lubricados y, además, la nutrición de algunas regiones también depende de su calidad.

Muchos de nosotros conocemos a personas que les han diagnosticado ojo seco y esto precisamente se produce por la falta de producción de las lágrimas; las molestias de esta alteración son muy intensas. Esto se puede comparar a que si la grasa de las glándulas de Miebonio no es suficiente, se evapora la lágrima rápidamente y también produce síntomas similares.

Por lo que las glándulas que estamos describiendo tienen una función muy importante, pero si se infectan y se tapan también producen muchas molestias. Lo primero que sucede es que la piel que se encuentra encima se pone roja, después inicia la sensación de dolor en la región y se puede hinchar el párpado.

Cuando se voltea el párpado se nota una bola blanca, lo cual nos indica su localización. Por ser una glándula mucho más larga y grande, el grano es bastante notable, sobre todo si se encuentra en la parte más externa de los párpados.

El tiempo que tarda desde el inicio de las molestias a que aparezca el chalazión varía, pero en la mayoría de los casos tarda dos a tres días en aparecer.

El tratamiento debe basarse en pomadas y gotas que contengan antibióticos y antiinflamatorios. Los remedios caseros no dan buen resultado, ya que son infecciones mucho más extensas.

El contenido del grano es característico de una infección, además de la grasa que se haya acumulado, esto es lo que precisamente se debe de tratar de exprimir, para que no se produzca un quiste y se quede una bola por muchos meses o años.

En caso de que no se pudiera controlar la infección y extraer su contenido, el especialista les tendrá que sugerir una pequeña cirugía, que consiste en abrir el chalazión y extraer la infección y sus cápsulas.

Una de las enfermedades que predisponen a las perrillas o a los chalaziones es la blefaritis: una infección que se produce en el borde de los párpados y en la mayoría de los casos es por estafilococo. Esta bacteria se encuentra normalmente en nuestra piel y al descontrolarse puede atacar sobre todo en regiones húmedas del cuerpo, como son los párpados.

La blefaritis se nota a simple vista, ya que se produce descamación de la piel y da una imagen de caspita o tierrita en el borde de los párpados o en la base de las pestañas.

La blefaritis es bastante común y difícil de tratar; la higiene a base de lavados con champú para bebés ayuda mucho, por lo que la aparición de perrillas o chalaziones estará directamente relacionada a la higiene de los párpados y la existencia de la blefaritis.

Como sugerencia, la visita al especialista para el diagnóstico y vigilancia es importante. Se tiene que hacer conciencia de que aunque la experiencia les puede indicar que estas "bolitas" no producen complicaciones severas a los ojos y se pueden dejar por mucho tiempo; obviamente, no es lo correcto, ya que puede existir blefaritis muy agresiva con pérdida de la mayoría de las pestañas y provocar inflamaciones crónicas alrededor de los párpados o inclusive al interior de los ojos.